Ir al contenido principal

Caja de herramientas para soñar

Por: Luisa Bernhardt

Desde que nacemos escuchamos expresiones en nuestro entorno sobre como la situación nunca cambiara, que esto no hay forma de arreglarlo, que las personas no salen de su estado de pobreza por culpa del “sistema”  y que este está diseñado para que los que no tienen “oportunidades” fracasen.

Todo lo antes dicho nos excluye de la escena como si fuéramos simples espectadores, pero formamos parte de la escena más de lo que creemos.  Alguna vez nos hemos preguntado: ¿Qué puedo hacer yo para cambiar esto? ¿Puedo yo cambiar mi entorno? ¿Puedo yo cambiar la vida de al menos una persona?

 Si bien es cierto que no todos los seres humanos han gozado de las mismas oportunidades, la mayoría sacaron provecho y alcanzaron metas, lo que en cierto modo los hace privilegiados frente a la mayoría; pero además de esto los dota de un gran poder, ya que pueden impactar la vida de otra persona y formar parte del cambio. Algo tan sencillo como acercarte a alguien y preguntarle: ¿Cuáles son tus sueños? ¿Cómo crees que podría yo ayudarte a realizarlos? hace la diferencia entre seguir quejándonos o formar parte de la solución.

Imagino que estarán pensando: seguro me responderán que su sueño es ganarse la loto, pues permíteme decirte que tuve la oportunidad de salir a la calle y preguntarle esto a varias personas y su respuesta estuvo muy alejada de algo así. Las respuestas en casi su totalidad tenían una palabra en común: aprender. Así como lo lees, puedes sorprenderte o creer que  son de otro planeta, pero viven aquí como y son como tú y yo.


Por esto, te exhorto a que te sientes, hagas una pausa y pienses en una habilidad que te apasione y en la que eres realmente bueno, que puedas enseñar a otras personas, por más sencillo que parezca; no hay conocimiento pequeño ni tema sin importancia, eso que para ti es algo común porque lo manejas al dedillo, puedo ser la herramienta que puede cambiarle la vida a alguien más y la encamine a realizar su sueño. Veras como cuando te involucras y apoyas, formas parte del cambio, y no esperas a que las cosas pasen, tú haces que sucedan. “Un sueño que sueñas solo es sólo un sueño. Un sueño que sueñas con alguien es una realidad”.

IG: @luisabernhardt
facebook.com: Luisa Bernhardt
Twitter: @lulubernhardt

Comentarios

Lo + visto

¿CapacitarME o CapacitarNOS?

Por: Luisa Bernhardt La palabra capacitación para mi tiene un significado muy especial, pues la asocio directamente con palabras tales como  libertad, felicidad,  mejora continua, calidad, crecimiento y un sin número de otras tantas relacionadas con ser mejor cada vez; esto sin importar el área, nivel educativo, social o la modalidad educativa. Nuestro mundo es cada vez es más cambiante y exigente en todos los ámbitos de nuestra vida, más aun en el plano profesional y el mantener actualizados los conocimientos es de vital importancia para lograr la excelencia. Si bien es cierto que los líderes deben mantenerse a la vanguardia y en aprendizaje constante, no menos importante es, que no deben ser los únicos que estén montados en el vehículo del conocimiento. Este es un viaje que debe emprenderse no en un automóvil de dos puertas, sino en un autobús, para dar espacio a que más personas puedan abordar. ¿ De qué valdría ser un supervisor o gerente con un curríc...

Cualquier día es año nuevo

Por: Luisa Bernhardt En los días próximos a finalizar un año, frases como el próximo año si iré al gimnasio, estudiare, cambiare de empleo, visitare la iglesia, haré, voy a...etc son tan habituales como el cerdo asado y se escuchan con más frecuencia que el merengue "Volvió Juanita". A raíz de esto me surgieron preguntas como: ¿Hay alguna ventaja en esperar a que cambie una fecha en el calendario para desarrollar nuevos hábitos, trazarnos metas y trabajar para alcanzarlas? ¿Qué diferencia puede hacer el cambio de un digito en una serie de cuatro números?, y luego de darle vueltas en mi cabeza al asunto, solo me surgió una respuesta: Ninguna. Si analizamos nuestro entorno, la vida sigue su agitado curso; los comercios no cierran sus puertas, los aeropuertos siguen funcionando, los centros de salud siguen dando servicios, y si cito otras áreas tendría que escribir 10 páginas para enumerarlas todas. Entonces no hay razón para decidir cerrar la empresa más importante de ...

Aprendo, emprendo y crezco

Por: Luisa Bernhardt Es común escuchar por parte de nuestros padres, familiares, amigos y allegados que aquellas personas que no terminan una carrera universitaria, están destinados a fracasar y más aún cuando se es mujer. En muchas ocasiones, la recomendación para las mujeres es buscar un buen esposo o compañero que supla las necesidades básicas, lo que limita la mujer al rol de dependiente. Entonces, surge la pregunta: ¿De qué otra forma se puede lograr el éxito, si no se han “tirado páginas para la izquierda”? La respuesta puede sonar trillada y repetida en múltiples ocasiones, pero sigue siendo la única: emprendiendo, puede sonar como un cliché, pero es cierto. Las mujeres por naturaleza tenemos esa sed de aprender algo nuevo constantemente, actividades tan sencillas como tejer, bisutería, macramé y hasta la un poco olvidada técnica de porcelanicron pueden hacer la diferencia entre esperar que llegue el día de pago o convertirte en una emprendedora que está g...

Haz una cita contigo

Por: Luisa Bernhardt “Nadie nació para estar solo” frase muchas veces escuchada cuando decimos que nos gusta pasar tiempo a solas. Si bien esta declaración tiene cierto grado de verdad, porque no podríamos vivir en un mundo sin otras personas, pues probablemente terminaríamos hablando con objetos (pregúntenle a Tom Hanks en la película naufrago), también es cierto que resulta necesario el disfrutar de nuestra compañía.   Vivimos en un mundo tan apresurado y afanoso,  que pasamos por alto el hecho de que en el día no hemos tenido ni cinco minutos para detenernos, simplemente abrazarnos o sentarnos a contemplar el horizonte.   Le damos tanta importancia al estar acompañados, relacionarnos, tener amigos, caer bien a los demás y lucir sociables que hemos olvidado a nuestro mejor amigo: nosotros. Pero, ¿Podríamos relacionarnos con los demás, sin habernos relacionados con nosotros primero? ¿Podría yo llegar a conocer profundamente a otra persona sino me...